sábado, junio 30, 2007

Los animales están alarmados


No sólo son algunos políticos los que andan alarmados y escondiendo o quemando papeles, por lo que pueda ser más que por lo que es. También los animales del Señor nos están anunciando que se encuentran incómodos.
Ha descendido mucho el nivel de vida de los animales de las Pitiusas.
Ha bajado mucho la calidad de vida. Apenas encontramos un sitio para poder dormir. Pagaríamos lo que fuera para poder dormir siete horas seguidas, pero no hay dónde.
Pues a los animales de Ibiza y de Formentera les ocurre lo mismo.
Yo no me río de la conducta de los animales. Los observo. Lo aprendí de mi padre, que en esto era catedrático: se comunicaba con los animales de una forma imbatible, hasta el punto de que llegué a pensar que conocía el día del cumpleaños de cada palomo del palomar.
Ahora me ayudaría, si estuviera aquí, pero todos tenemos un calendario marcado, quizás afortunadamente.
Papá, ¿qué les ocurre a las abejas? Se pierden, desaparecen, no dan miel, están como estresadas. No será la fumigación contra la procesionaria, ¿verdad? Hay quien habla del caos de las ondas electromagnéticas de los teléfonos móviles. Hay quien habla de un hongo que acaba por debilitarlas, o sea, las mata.
Pero tampoco tengo claro que exista, cada año más temprano, esta pavorosa invasión de medusas. Calentamiento de las aguas, zooplancton, ausencia de depredadores, bueno sí... pero eso no es normal.
No te pregunto por los cerdos, las cabras, las ovejas, las pocas vacas, pero ¿no te extraña a ti que de repente Ibiza se haya llenado de víboras, culebras, crotalillos?
Esto no se había visto nunca. ¿No será señal de la fin del mundo? (el final del mundo es en femenino en ibicenco, en catalán que lo digan como quieran. No saben.)
Pero mi padre sabría cómo acabar con las serpientes. Yo también lo sé.
Y decidme vos, las gallinas, incluso las gallinas no ponen huevos. Dicen que están estresadas. ¿Cómo no van a estar estresadas si tienen focos de discoteca, ruidos y músicas toda la noche? El huevo requiere paz para somatizar el calcio y formar la yema. Un huevo no se puede agitar de mala manera, y eso lo sabe todo el mundo.
Si hasta me dijo un vecino que está muy alarmado porque suelta palomas y se le pierden. Los barcos de la Navy las desorientan con sus potentes emisiones de radar.
Será eso, porque si no le echamos la culpa a los norteamericanos (que de todas formas la suelen tener) ¿a quién culpamos?
Y espérate que no hemos hablado de ranas, sapos, erizos, lagartijas...



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viernes, junio 29, 2007

La venganza del fenicio

Esto no puede ser de buen agüero: apenas se dieron a conocer por encima los proyectos de arrasar Ibiza mediante unas autopistas diabólicas (serán conocidas muy pronto con el antiguo nombre de `autopistas de la muerte´) y ya empiezan a aparecer las serpientes.
Esto puede ser cosa de Baal. Quizás de Tánit, más hecha a los venenos y a las víboras. No es casualidad. Y a mí me parece muy bien que vengan las serpientes.
¿No vienen los mafiosos gallegos, los rusos y los ucranianos a blanquear su dinero en la isla blanca, destrozando nuestro frágil paisaje? Pues que vengan los crótalos. Tendríamos que importar de Arizona una colonia de serpientes de cascabel, para que acaben con tanta rata.
Los gatos se han aburguesado, los búhos y los murciélagos desaparecen, los erizos van escasos... pues, hala, toma dosis de ofidio con oficio. Estas serpientes saben muy bien lo que hacen.
Yo no les temo, porque estas pobres culebras son bobas como las lagartijas. No sirven para nada. Es más, sirven de alimento a las serpientes de verdad. Las culebras bastardas son más tontas que bastardas.
Ibiza vivía fuera del tiempo y del espacio, hasta que llegó la retro-excavadora y rompió el sortilegio en mil pedazos. Y habrá serpientes, como las hubo en tiempos muy arcaicos, víboras peligrosas. No me extrañaría que acabara por regresar el escorpión.
¿Por qué no? ¿No hemos importado plantitas exóticas y la caulerpa taxifolia, que es un alga asesina? Y estamos a punto de dar entrada a un mosquito hideputa que se llama Tigre, el cual ya me ha catado en el delta del Ebro. Este no pica: te abanderilla, como El Fandi. Te sientes muy poca cosa delante de un mosquito-tigre hambriento.
Esto de las serpientes parece un descuido de los plantadores de troncos de olivo. Duermen tan tranquilas y amanecen en un mundo nuevo: Ibiza es un paraíso, de momento, para ellas. Aquí no tienen serpientes mayores, los halcones también están atontados y no hay grandes depredadores (aunque hay uno; ya se dará conocer, no pongamos a las culebras sobre aviso).
Dicen que rociando los huecos de los troncos con café, se despierta a las culebras. Toma, y con una fumigación de cocaína. O con una buena fumigación de humo con cáscara de naranja, que tiene trementina. O poniéndoles cerquita una canción de Paris Hilton. Métodos hay muchos, pero estos jardineros no trabajan de asustabichos sino de vender olivos viejos.
Hacemos las malditas autopistas y la isla se llena de serpientes. Los signos han hablado. Que lo tenemos claro: la isla rajada en dos, llena de serpientes y ni un turista que llevarse a la boca. Y nada digo de las medusas.

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Sigue la piratería, pagan los atunes

Sigue la piratería en el mar, porque nunca ha cesado. Y no me refiero a los piratas reconocidos desde el Mar Rojo hasta Filipinas (habrá zonas donde no hay o no se atreven). Estos piratas actúan diariamente y tienen sus canales especializadas de comunicación para pedir rescates en dinero o mercancías.

Lo saben muy bien las compañías aseguradoras. Simplemente se acerca un navío con media docena de desgraciados armados con rifles y ahí deciden qué hacer contigo.

Pero a veces los piratas no te roban los aparatos, el barco entero o te liquidan de unos tiros: simplemente van agotando los caladeros, se van apropiando de tu comida. Llegará un momento en que tu nicho ecológico quedará esquilmado y motivará migraciones, hambrunas o crisis profundas.

Esto ocurre en la pesca de altura. Nadie aceptará que es un pirata, pero si se le explica el alcance (dudo que ellos ya no lo sepan) de sus fechorías, comprenden.

Pero les da igual, porque estas cosas –se piensa ingenuamente- son a largo plazo y sólo afectan al prójimo y allá se las apañe él con sus problemas.

En la pesca de atún se desata una cadena de damnificados: desde el propio atún hasta los hoteleros de Murcia (de donde provienen muchos atuneros, pero da igual de dónde vengan) y los hoteleros de Ibiza, que se verán afectados por unas insolentes plagas de medusas.

Los atuneros persiguen al atún y lo acosan para enjaularlo. El que no pueden capturar vivo lo izan a bordo y lo conservan en frío para venderlo en el puerto directamente. No hay pérdidas.

Hemos fallado en toda la pirámide de mando: desde los autoridades de puerto locales hasta las grandes autoridades de la Unión Europea. La UE debería perseguir a los perseguidores, pero no puede o no sabe por no dejar sin trabajo a los pescadores, de tal manera que quedaremos sin atunes y sin turismo.

Si nos quedamos sin delfines, sin tortugas, emperadores, tintoreras, ni atunes (obviamente porque nos los comemos) dejamos el mar en manos de fenómenos que no podremos controlar. Y ya estamos en ello.



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sábado, junio 23, 2007

Una plaga entre la juventud británica

Recuerdo haber escrito sobre este tema en algunas ocasiones: los adolescentes británicos, a todos los efectos casi unos niños, están sufriendo una plaga sanitaria. No es un problema de sexo, es un problema de salud.Todos los informes son alarmantes, y en Ibiza no es necesario hablar con muchos camareros y personal en contacto con las turistas británicas para descubrir la confirmación.La juventud británica no supera esta situación de crisis, que viene arrastrando desde hace lustros: hay un exceso de embarazos prematuros o juveniles; hay mucha incidencia de las enfermedades de transmisión sexual (ETS), sobre todo la gonorrea o blenorragia, la clamidia, menos la sífilis y el HIV del sida.Acabo de leer el resumen publicado en el Daily Mail (doy el enlace en mi blog) y lo único que sorprende es que sea tan parecido al anterior.Un sistema sanitario envidiable aun con sus defectos, un nivel de vida alto, información por un tubo y educación obligatoria para todos los niños de todas las razas. A pesar de todo, la juventud británica sigue embarrancada.Los embarazos no deseados a edad muy temprana suelen conducir a un abandono de los estudios, divorcios, consumo abusivo de alcohol y drogas. Hoy, la juventud británica es la tercera del mundo en consumo de cannabis.A la larga, lo que empezó como una aventura vital emocionante acaba o suele acabar en un psiquiátrico o en un abandono total de cualquier proyecto de futuro.No es culpable el alcohol, dice el estudio. El alcohol y las drogas desinhiben y sólo añaden gasolina al fuego, facilitan las conductas de riesgo y sigue la espiral de enfermedades.El Independent Advisory Group of Sexual Health and HIV solicita que el Estado se enfrente con rigor, constancia y seriedad a esta plaga que está azotando desde hace tiempo a la juventud inglesa.Piden educación abierta y exigente. Que no se fomenten en los juguetes juveniles las sugerencias subliminales de tipo sexual y que, dentro de lo posible, no se alaben las conductas de las modelos y las actrices que superficializan la responsabilidad de la vida. También -y eso parece un chiste- que se replanteen los horarios restrictivos de condones en la televisión. Por ejemplo, no se puede mostrar la goma sin el envoltorio. Quieren que se desmitifique el uso del condón que, en cualquier caso sería una barrera muy eficaz contra el sida, la gonorrea y otras enfermedades que se contraen por contacto de fluidos directamente.No les arriendo la ganancia. Será un trabajo difícil si se comportan como en Ibiza.


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miércoles, junio 20, 2007

Ingleses



El aristócrata y escritor José Luis de Vilallonga habla pestes de los ingleses, lo cual se explica por el hecho de que estuvo casado con una inglesa. Pero no es muy inteligente hablar mal de toda una comunidad por una mala experiencia personal con uno de sus miembros.
Avala mi tesis -de que Vilallonga en esto no es muy inteligente- el hecho de que no que se casara con una hermética e hipócrita británica, sino de que se casara al menos cinco veces.
Comprendo que alguien se case una vez. Pero alguien que se casa cinco veces a la fuerza ha de tener un tornillo flojo. Y respeto, etcétera y todo eso que se dice. Sí, respeto, pero yo pienso lo que pienso por mucho que respete.
Me viene eso a la cabeza por el simple hecho de que vienen menos ingleses. Para muchos, los ingleses son los causantes de nuestro hundimiento: por una parte, la oligarquía local -reminiscencia de cierto caciquismo- los ha manipulado burdamente, al referir como causa de la muerte de muchos niñatos ingleses el mal estado de nuestras carreteras.
Pero, por otra parte, cuando algunos promotores han hecho su agosto con estas obras mediante métodos que se deben analizar (siempre lo digo: no basta con este cuento de las responsabilidades políticas), entonces los ingleses no vienen.
Ahora que se podrían estrellar tan a gustito, los inglesitos se nos marchan a Corfú. Aquí quedan dos o tres fortunas más cebadas, la isla hundida hasta límites que no me atrevo a predecir, y las discotecas con los turisticotes residuales que ya no pueden ir ni siquiera a Corfú (que es mucho más barato que Ibiza).
Quienes suelen hablar peor de los ingleses son los propios ingleses. Hay que tener presente que en Ibiza ya viven miles de británicos a lo largo del año. Saben que la isla que eligieron ha perdido el aura, que la vida es mucho más cara que en cualquier ciudad del Reino Unido y que las grandes obras públicas, paradójicamente, rebajarán la calidad de vida. O sea, conseguirán el efecto contrario al que se pretendía.
Ahora ni siquiera vienen. Durante los primeros cuatro meses, la nacionalidad británica ha descendido más de un 50%. Eso es muchísimo, porque ellos son el primer mercado emisor.
Ahora mismo Ibiza se sustenta sobre tres pilares: ingleses, alemanes y españoles. En Formentera, los italianos.
Sabemos que los españoles hacen lo que pueden y que todavía hay mucho papanata, capaz de seguir a una mochila o cualquier chorrada de la tele-basura. Sabemos que los alemanes tienen mucho cariño por Bulgaria, países de la exYugoslavia, Turquía, Hungría...
Pero ¿qué sabemos de los ingleses? Corfú y poca cosa más. Veremos.

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domingo, junio 17, 2007

Los comienzos

No es cierto que los comienzos sean siempre titubeantes y llenos de dudas. Pero en Ibiza sí. Esto es injustificable, aunque es comprensible.

Las compañías de charters dicen que no pueden poner líneas regulares porque no hay gente que ocupe las plazas. Y los empresarios de Ibiza suelen quejarse de que no hay aviones para viajar a Ibiza en temporada media o baja.

Pero no se entiende como una isla que tiene registrados 120.000 habitantes, con una población joven en edad de estudiar y con residencia en la península –más de la mitad son peninsulares o de naciones europeas- no mantenga un movimiento de pasajeros suficiente.

Es como si la isla quedara dormida, narcotizada: los más jóvenes se marchan a pasar el invierno a Vietnam, la India, Tailandia o a Marruecos, o simplemente a su casa de La Puebla de Cazalla. ¿Y el resto? Encerrado en su casa.

Ibiza queda sin vida, catatónica. El paréntesis navideño no supone nada, la primavera sólo sirve para levantar más paredes y el verano…mmm… ya no esperes nada hasta pasado el quince de junio.

Y dice César Jerez que esto va cada vez a peor. No lo dudo. De todo el tipo de turismo que podría venir a Ibiza, más o menos durante todo el año, hemos escogido dos países: Inglaterra y Alemania. No sé cuál es peor. Del turismo emisor, sólo una franja de edad, de los 15 a las 25 años. O sea, vienen cuando están de recreo (julio y agosto). Y de éstos sólo nos sirven los que vienen a empastillarse, emborracharse y a deambular como zombies durante la noche y el día.

Este tipo de gente es encantadora: tienen energía y una cantidad de dinero. A los cinco días ya están desprovistos de ambos. Pero no cede el ruido, por lo que la poca gente que tiene un cierto interés en salir a cenar, a caminar, se siente poco motivada a hacerlo.

Los jovenzuelos son maravillosos, pero ahuyentan a los pocos turistas sensatos. Resumiendo: hemos seleccionado los más malos entre los peores.

Y chunda-chunda-chunda.


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sábado, junio 16, 2007

Cambios inaplazables


Es muy astuto Xico Tarrés cuando se declara humilde: sabe que vive políticamente de prestado. Perdonen mi tono retador, pero este hecho se verá confirmado en las próximas elecciones generales o legislativas, imagino que dentro de un año.
Cuando la maquinaria del Partido Popular se ponga a funcionar, el PP va a barrer en España y cuanto más tiempo pase, más en evidencia quedará este ahuecado personaje que es ZP, inventado por las presuntas izquierdas españolas (aliadas con el reaccionarismo romántico de los nacionalismos).
Bueno, regreso a casa: Xico tiene muchos votos por acción o por omisión de la derecha o del centro pitiusos. Ya lo sabe él. Y lo que es más alarmante para los vividores y zánganos de la política, también lo saben en el PP, aunque se cuidarán mucho de decirlo.
Desde antes del comienzo de las obras de las monstruosas autopistas (bulevares según la teledirigida Stella Matutes) yo había detectado en muchos amigos míos, votantes declarados del Partido Popular, un rechazo visceral (y digo bien) hacia distintos comportamientos de distintos personajes de su partido. En especial hacia estos extraños y grisáceos personajes que presumen de haber llegado muy lejos.
Las elecciones las ha ganado Xico Tarrés ante el beneplácito de mucha gente de derechas que ni siquiera se ha acercado a votar. O han pasado.
Y lo que se va sabiendo no es muy tranquilizador para los miembros del gobierno y del Consell de Ibiza.
Tiempo habrá para clarificar esto a quien le corresponda hacerlo. Sería un error gravísimo soslayar tanta basura bajo un manto de mal entendida cortesía política. De modo que a trabajar y a cada cual lo suyo.
Pero esta labor de clarificación con luz y taquígrafos, señor Tarrés, debe ir acompañada de otras medidas. Que su gabinete de prensa le refresque las quejas de los hoteleros, fomentos, empresarios, taxistas, etc. Quejas formuladas a Pedro Palau.
Ibiza necesita medidas ejemplares, ejemplarizantes e inaplazables. Déjese de cuentos. Nunca nadie encontrará tantos apoyos en la sociedad civil ni entre los empresarios.
Ibiza no puede ir peor. Perder a los niñatos clubbers durante seis meses no sería tan terrible (que tampoco debe perderlos, sólo mostrarles que deben comportarse como en su casa). Ibiza ya no puede ir a peor. Y es desde el gobierno desde donde se deben enviar mensajes inequívocos a la sociedad. En todo lo demás sólo cabe esperar, divulgar la Ibiza cordial y sensata de siempre y, desde dentro, impedir la pequeña piratería y el desmierde, el intrusismo y la delincuencia. Nadie ha dicho que sea fácil.

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miércoles, junio 13, 2007

El Grupo 77 pierde a Hemio Michel

Hemio Michel ya pintó la destrucción de Ibiza hace al menos treinta años.

Había nacido el 24 de noviembre de 1936 y ha fallecido (el 24 de mayo) en la ciudad de Hamm, donde vivía desde que abandonó Eivissa ya en los años ochenta. Los dolores le impedían cualquier tipo de ejecución compleja. Uno de sus últimos trabajos más creativos fue una visión de la historia de Ibiza a través de sus barcos, que me entregó con la ilusión de que yo escribiera unos textos para acompañar. Cumplí parcialmente la promesa, pero ahora me veré obligado a culminarla.

Había nacido en Frankfurt-Main y en 1958 acabó sus estudios en Bellas Artes decorativas, dibujo, ilustraciones, etc. La ilustración de libros fue uno de sus campos preferidos y donde podía explicarse mejor, tanto por los tamaños como por el concepto mismo, pues Hemio trabajaba mucho con los conceptos. Era un dibujante, no un plástico que trabaja con los valores visuales de la plástica y de la composición.
Era un poco más viejo que el batería Axel, pero pertenecía a esta generación de alemanes cordiales, dulces, amables que llegaron a Eivissa y absorbieron el carácter sereno y pausado del Mediterráneo. Como ellos, podríamos mencionar a Egon Neubauer, que también vivió en Sant Antoni, al mismo Axel, a Hans Laabs, Erwin Bechtold, Micus, Will Faber... son o fueron espíritus muy receptivos que viven, comen, caminan y se visten como los ibicencos. Nada que ver con la avalancha de alemanes con pinta de macarra, prepotentes e insoportables (igual las mujeres que los hombres) que inundaron la isla a comienzos de los 80.
Antes de llegar a Eivissa trabajó en distintos proyectos, ilustrativos y decorativos, entre otros con Samuel Bronston o con el director teatral Enrique Llovet (Madrid). Aprovecha para viajar y conocer parte de Europa, hasta que conoce Eivissa en 1962. Parece que la isla le atrapa y se queda. En 1963 ya exponía en la galería del húngaro Mishka -otro personaje que tuvo una gran actividad en Sant Antoni en los años 60-- conocida por Buda. No piensen en el personaje hindú, sino en la palabra húngara Buda/Pest, los dos flancos que dan nombre a la hermosa capital de Hungría.
Da un poco de pena conocer los orígenes internacionales de Sant Antoni en los sesenta, prolongación de una gran actividad en los primeros cinco años de la década de los 30. Hemio Michel siguió exponiendo en España y en Alemania, y cumpliendo muchos contratos de ilustración. Este era su puente fuerte: dibujaba con una gran facilidad y podía imaginar las situaciones más impensables.
Cuando llenó el paisaje de Cala Tarida o las Platges de Comte de grúas y de bloques de apartamentos le llamaron exagerado. Hoy, la realidad ha superado aquella visión premonitoria.
En 1977, Eivissa ya comenzaba a perder fuelle. Exponer resultaba incómodo y difícil. El mismo Sant Antoni ya se estaba sumiendo en un callejón sin salida, con un crecimiento ascendente que no hacía presagiar nada bueno.
Los artistas se han de adaptar y así fue como la tertulia de varios amigos cristalizó en una agrupación sin más pretensiones que facilitarse el ritmo y los contactos de exposiciones. Eran el ibicenco Antonio Hormigo, que ya se dedicaba íntegramente a la talla de madera. Ya estaban naciendo esculturas muy interesantes. Antonio había recogido el testigo de su padre y con el paso de los días decidió abrir su taller y dedicarse a la escultura. Fue una decisión valiente, siempre apoyada por su esposa Carmen, una mujer de un hermoso carácter muy resistente.
Paco Torres era un gaditano que había llegado a Ibiza con su esposa, María Martín, como pareja de baile flamenco. Y se quedaron. Abrieron su academia de baile, pero Paco siempre quiso significarse como pintor. Era su gran meta personal. Y logró pinturas, unas pinturas abstractas muy ricas en mancha y en color, de un gran nivel.
El tercero era Bert May, un pintor de Colonia de hermosa melena blanca. Tocaba muy bien la guitarra, y cuando pudo, no dudó en residenciarse en su casa de campo en Sant Antoni, junto a su esposa Isabel. Las pinturas de Bert eran, en general de factura figurativa muy cálida y fácil de captar. También podía realizar hermosos abstractos, siempre con calores cálidos. Paco y Bert eran los pintores.
Pero Hemio Michel era el dibujante, el gran dibujante, aunque él quería darles una textura pictórica. Pero en general se conformaba con iluminar los dibujos. Esa era su fuerza y su debilidad. Unos dibujos magníficos, por los que cualquier editor pagaba buenas sumas.
Me entero pasadas unas semanas de su fallecimiento. Lo siento y me uno al sentimiento de Inge Brockhaus-Michel y de Marc Michel.
Todos los amigos que dejó en Eivissa nos unimos en este momento. Hemio Michel aportó generosamente sus saberes y ayudó no poco a levantar la deteriorada imagen de Sant Antoni.
Aquellos cuatro artistas (Bert, Hemio, Paco y Hormigo) mantuvieron encendida la candela en años muy bajos de Sant Antoni. Nuestro agradecimiento y nuestro recuerdo, amigo Hemio.

Enlace al Diario de Ibiza

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Los comandos corsarios de Narbona


Si usted va con su barquita y se encuentra en algún sitio con un banco de amenazadoras medusas, coja un número de teléfono gratuito (debería estar expuesto en los clubes náuticos y puertos deportivos) y llame a la ministra Cristina Narbona.
Ella mandará a sus chicas a que limpien el horizonte y los fondos.
Esa es la idea: la ministra y el Ministerio de Medio Ambiente, en presunta colaboración con las comunidades autónomas, quiere articular unos comandos detectores en los cuales cualquier patrón de un barco de recreo puede colaborar. Sólo ir avisando.
La fase dos consistiría en mandar a los pesqueros o a las lanchas especializadas a recoger con redes la masa muscular y filamentosa. ¿Y filamentosa? Pues no, los filamentos se desprenden al menor contacto con la red.
Si la recogida de celentéreos se hace a menos de cien metros de la playa, se consuma la tragedia, pues durante horas irán llegando las hilachas urticantes a la zona de baño y, al no ser detectadas visualmente, van descargando sus tóxicos en la piel del bañista o de la bañista, como diría bárbaramente Ibarretxe o un moderno de Iniciativa de Progreso al Cambio y Regreso a la Revolución.
Los ecologistas ya hace tiempo que avisan de la progresiva e imparable infestación de medusas en el Mediterráneo occidental (y en el oriental también, al menos hasta Grecia). La plaga aumenta y las razones son muy conocidas.
Por una parte las aguas del mar han subido de temperatura y existe menos aportación de torrentes y ríos. Pero además, una vez generados por las condiciones climáticas, se desarrollan sin la obstrucción ni la competencia de sus depredadores directos (delfines, tortugas, atunes, etc.). Y hay comida en abundancia, porque los boquerones y las sardinas que compiten por el zooplancton están siendo esquilmados por los pesqueros.
O sea, que hemos hecho muchas cosas, pero ninguna bien hecha ni en la dirección correcta.
La solución mecánica de arrastrar a la masa de medusas hacia el interior, o sacarlas y secarlas es puramente provisional y muy poco eficaz. Es un parche coyuntural, como casi toda la política.
Ningún político piensa más allá de los cuatro años de su mandato. Casi lo mismo ocurre en la Unión Europea, que falla estrepitosamente en sus políticas mediterráneas de seguridad, pesca y ecología.
La solución ha de ser global y a largo plazo, es decir, no hay solución. Ello implica unos gastos enormes, unas pérdidas irrecuperables en el turismo. Ya sólo nos faltaba eso: sin turismo, España se especializará en rocíos, guitarras, nacionalismos y virolais. ¡Qué bien, hoy comemos con Isabel!

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domingo, junio 10, 2007

Hablar de dimisiones da risa


Yo pensaba que la consejera Stella Matutes tomaría conciencia de un momento a otro y se apercibiría de la magnitud de las animaladas de su consejería y del Consell en general.
Pero no. Afortunadamente parece tener pocas ideas, pero las que tiene son aterradoras. Ya empezó su carrera de vedete, en palabras de su progenitor, pregonando las bonanzas estéticas de los bulevares de Bruselas.
En Bruselas serán bulevares, aquí no son otras cosas que avenidas o paseos o vías. Qué manía con emplear palabrejas vikingas para decorar el porte del burro.

(Por cierto, Lurdes Costa ¿qué vas a hacer con respecto al nombre del bulevar?)

Pues no, no dimite ni entiende el alcance de sus autopistas: le va la marcha. Es más, le da risa la simple idea de que le pidan la dimisión. Y en esto yo le doy la razón: ¿de qué va a dimitir? De consejera en el gobierno del Consell ya la han cesado los votos de los ibicencos. Y de consejera en la oposición no puede dimitir porque no ha tomado posición de la carga.
Me recuerda a Alfonso Guerra, domesticado y calladito a la hora de votar sí al Estatut de Cataluña. Una periodista le preguntó a pie de calle su opinión sobre la dimisión de Miguel Sebastián (este bicho que quiere meter en España diez millones de inmigrantes más).
Y Guerra no pudo reprimir su naturaleza sarcástica:

-- ¿Dimitir de qué? ¿De qué ha dimitido Sebastián?

Lo mismo se le puede decir al ex-alcalde de San José, que se ha dado el piro cuando ha visto que una concejalía no permite virguerías con los números.

Lo mismo puede decirse de Stella, que pasará a la historia por haber dado la gran puñalada al turismo de Ibiza y a la integridad de la isla. Nunca lo había dicho así, porque yo responsabilizaba a su progenitor, pero veo que Stella ya es mayorcita y que le gusta asumir responsabilidades.

De manera que pasará a la historia por este sentido del humor: ¿Dimitir yo? Uyy, qué risa. ¿Autopistas? Son bulevares.

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sábado, junio 09, 2007

Se desentienden


Cada principio de temporada nos introduce en una ceremonia jeremíaca, de quejas y de lamentos. Serán los dolores que anteceden al calentamiento muscular del verano.
Ya no entiendo que algunos hoteleros se quejen de que hay una competencia desleal (que la hay, desde luego) porque no cuadran los números de las entradas por aeropuerto y el de ocupaciones en empresas hoteleras.
Ellos saben que Ibiza ya tiene un movimiento mecánico de población que se ubica en apartamentos, casas particulares o en una residencia de su propiedad. Muchos propietarios incluso alquilan su casa durante tres meses y aprovechan ellos mimos para escaparse de Ibiza.
Después hay los miles de empleados flotantes que trabajan en discotecas o negocios de ocio diurno y nocturno. Estos no suelen alojarse en hoteles sino en apartamentos que rentabilizan de varias maneras.
O sea, Ibiza tiene vida propia al margen del libro de registros del hotel. Se han acabado los tiempos en que llegaba un avión repleto a rebosar. Varios autobuses se acercaban al aeropuerto, cargaban a los turistas y los iban repartiendo en diversos hoteles de la isla. Esto se ha terminado.
El aeropuerto consigue cifras récord, pero a la hora de distribuir al personal, son muchos menos los que usan el hotel.
Hay que aceptar esta situación (entender, ya la entienden) para programar un negocio. No es extraño que algunos grandes empresarios de la isla hayan vendido lenta y muy discretamente sus hoteles. Es como si alojar a clubbers y hooligans ya no fuera un negocio destacable. Es mucho mejor venderles entradas de discoteca o venderles un piso. Incluso construir los pisos. Construcción, en vez de hostelería.
Supongo que a la isla y sus posibilidades hosteleras le ocurrirá lo mismo que a los políticos del PP, que dicen no entender las razones de su derrota. No entienden, pero sí entienden que deben dimitir si no ocupan un cargo rentable. Entienden lo que les conviene. Y por ello se desentienden de su compromiso electoral, de su compromiso ante la sociedad.
Esto no es astucia, sino cobardía política.
Hay que reconocer las causas para encontrar la solución.
Por ejemplo, ¿por qué hay tanta gente que apoya la construcción de apartamentos y de viviendas, sabiendo que ya sobran miles de plazas?
Cuando llegue el verano, estos apartamentos se llenarán, y la gente que se cobije en un apartamento no irá a los hoteles. No se puede tener todo.

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miércoles, junio 06, 2007

La isla de los cristales rotos



Cuando escribo estas líneas todavía no se han contado los votos por correo de los emigrantes baleáricos, y dado que Xico Tarrés ha ganado tan sólo por una diferencia de 53 votos la presidencia del Consell Insular, cabe tener en cuenta que no cambiaré este texto, sea cual sea el resultado definitivo, y que por lo demás ya da igual en Ibiza quién manda. (O quizás no, ya se verá).
Lo digo por el título: en Ibiza ya se han roto las cerámicas valiosas de dos mil años de antigüedad. Los cristales ya están machacados y las piezas escondidas y enterradas en algún conglomerado, para no dejar más pruebas.
Ya les vale.
Que da igual que en las consejerías rijan licenciados en Filosofía y Letras, letrados o amantes del arte: el destrozo venía mandado por arriba, esto es por la locura, y no mandan razones donde no puede haberlas.
Y la prueba es que el PP no se explica las causas de su derrota unos días después. No encuentran explicación. O simplemente no tienen arrestos para darla, lo cual es mucho peor. El Partido Popular es un partido importante, que en Baleares (al menos en Ibiza) se ha ganado un puesto en la oposición durante al menos cincuenta años.
El PP de Ibiza ha hecho lo que más tememos los gobernados: que el gobernante se vuelva loco y le dé a la combinación que dispare el armamento atómico contra la China.
El PP de Ibiza ha enloquecido y ha disparado el armamento (grúas, retroexcavadoras, camiones, cementeras) contra los propios ciudadanos. A algunos incluso los ha echado de malas maneras de su propia casa.
¿De verdad no sabemos por qué el PP ha perdido las elecciones?
Y no es bueno eso. El PP es imprescindible en la oposición pitiusa, y si tenemos que echar del Gobierno de España al otro Napoleón. Ya no llegaremos a tiempo para evitar la escabechina zapateril, pero al menos salvaremos lo que se pueda.
En Ibiza se invierten las tornas.
Debemos recoger los fragmentos de las cerámicas y de los cristales. Los volveremos a unir, con el agregador de la paciencia y del decoro. Ibiza fue un sueño, y es ahora un sueño roto.
No sabemos qué nos depara el futuro, pero nosotros sólo podemos ponernos manos a la obra, con cuidado y constancia. Y haciendo que los culpables respondan de sus actos. Estaban advertidos mil veces.
Así anda el fenicio, sabiendo que las ideologías han muerto y que debemos usar el cerebro para discernir en cada caso lo que mejor nos conviene. Y así puede darse el caso de que en Ibiza no conviene el PP, pero que en España el que no conviene sea el PSOE y los nacionalistas. Andiamo.


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domingo, junio 03, 2007

Una semana muy larga

En Ibiza hemos agotado el territorio, el agua, un modo de vida, los delfines y los atunes, las tortugas, la paz y la tranquilidad y casi la paciencia. Pero queremos saber los lazos de la presunta corrupción del PSOE y del PP. La sociedad quiere saber. ¿Bulevard qué?

Ya durante la noche del 27 la incertidumbre del resultado en el Consell y en algunos ayuntamientos hacía presagiar lo que ha sido la semana: una larga sesión donde los acontecimientos se suceden.
Aquí nadie parece defraudar las expectativas. Todos van demostrando y ratificando su catadura, como este personaje que ha sido alcalde durante 24 años. Deber ser el único político de toda España que, tras 24 años (recuerdo a Pujol, Ibarra y algunos otros) el electorado le da la gran patada.
Y claro, de repente ha caído en la cuenta de que tiene una empresa que le da de comer, lo cual sugiere implícitamente que durante 24 años ha estado viviendo de otra cosa. Ya ni siquiera disimulan.
Pero no se apresuren.
Hay para todos.
Hay mucho material pendiente, y hablo de justicia, de demandas (y seguirán cayendo) y de denuncias.
Una semana muy larga. Incluso Tarrés ha seguido el guión: gobernaré para todos, soy muy humilde. Ya: todos somos iguales, pero sobre todo en el socialismo, unos somos más iguales que otros.
No esperen gran cosa: va a cambiar el túnel, el cruce de Jesús. Bueno, obras que al parecer no están bien logradas y que presentan problemas. Tarrés tendrá que demostrar otras cosas, al margen de cerrar un túnel.
Bien está la humildad, pero mejor la resistencia y la aplicación de criterios claros de defensa de la isla.
La gente no se las traga. Y la gente apoya a Tarrés, porque no hay ninguna fractura social: incluso los conservadores han quitado el voto a sus representantes. Por lo tanto, las presiones llegarán de los mismos de siempre. Y se ha votado a Tarrés es para que les explique desde el primer momento que no es lo mismo una cosa que otra.
Una semana muy larga. Tarrés ya sabe de sobras desde donde le disparan. Y sabe quién y porqué.
Si consigue enderezar el rumbo de esta isla, cosa que le será difícil, eso que llevamos conseguido, los conservadores y los conservacionistas. Ibiza está a un nivel muy bajo. ¿Conseguiremos detener el hundimiento en cuatro años?


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sábado, junio 02, 2007

El fenicio toma notas

Diógenes ha escrito"si no te vas ¿cómo podré echarte en falta?" o algo así. Con Ibiza casi pasa lo mismo: Mejor añorarte que soportarte. Esloganes del siglo XXI.


No estoy de acuerdo en que la sociedad española está encanallada y envilecida por la corrupción. No somos ni más ni menos corruptos que el resto de ciudadanos europeos.
Otra cosa es que nuestro sistema no sea capaz de depurar seriamente las responsabilidades. Cárcel, etc. Y cumplimiento de penas, etc.
Y que los partidos (me refiero al socialista, pero a los demás también) no sepan encontrar la manera de regenerarse, imposible si no se llega a un acuerdo para financiar a los partidos.
Mientras los partidos tengan la necesidad de recurrir a las comisiones para financiarse, se están creando situaciones de dinero negro, de presiones y de chantajes, de desigualdad de oportunidades.
Hace tiempo que la financiación de los partidos políticos españoles y la Ley Electoral debieran haber entrado en una fase de estudios consensuados para solucionar este estado de cosas. Hoy, este cáncer de la corrupción, crea mucho dolor y mucha ineficacia.
Pero el ciudadano no avala con su voto este estado de cosas.
Vota por una opción o por la contraria, pero no hay que entender que al votar asiente en este tipo de aberraciones administrativas, económicas y políticas.
Acabo de ver el resultado en Marbella: la candidata (se llama Ángeles Muñoz para más cachondeo) es del PP, pero ha barrido en la alcaldía, con una mayoría absoluta aplastante.
Decía José Juan Cardona que debían reflexionar con calma para saber las causas de la sangría de votos del Consell Insular de Ibiza. Reflexione, reflexione.
El problema, los problemas de Ibiza no han acabado sacando a Palau -muy merecidamente- del despacho. Justamente acaban de empezar.
A ver cómo recuperamos la imagen de esta isla en adelante. Cómo se resuelven en los juzgados el centenar largo de casos que irán saliendo. Cómo diablos pagamos unas autopistas diseñadas aparentemente por una caprichosa mano que no muestra sus justificaciones técnicas.
Tarrés ha recibido un regalo envenenado.
Ibiza tiene ahora difícil gestión. A eso se añaden unos socios adscritos al más radical de los catalanismos y que en anteriores ocasiones mostraron la extraña tendencia a crear problemas en vez de solucionarlos. Incluso se atrevieron a tumbarle el nombre `Ibiza´ a la isla. No lo olvidaré nunca.
A pesar de socios tan poco recomendables y apreciados por la mayoría de ibicencos, Tarrés ha ganado. Palau ha perdido. Le han perdido.
Ahora tendrá mucho tiempo para reflexionar. Y para explicar qué es eso de Islas-asfalto, etcétera y más etcétera para cortar bacalaos.

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