miércoles, diciembre 30, 2009

Las Saturnales en vez de las Navidades


Miren, les voy a hacer una confesión: no me gustan estas fechas navideñas. Dicen los psicólogos que el nacimiento de la primavera y los días finales de diciembre son los más propicios para los suicidas. No es mi caso tan extremo y a todos animo al optimismo aun en los peores momentos.
Las Navidades están bien para los niños y quizás para las familias numerosas, mientras se lleven bien. Dicen que todos nos volvemos como niños. Pues no, mire usted, yo no quiero volverme como un niño y casi estoy llegando a la conclusión de que sería una meta recomendable que los niños se hicieran adultos de una vez. Y que pudieran comprarse un piso o alquilarlo y vivir su propia vida. Y eso sí, ser muy amigos. Y besuquearse.
Me temo que hace muchos años ya me descolgué de esta vorágine de campanilleos almibarados y de consumismo atroz. Las Navidades para mucha gente son una tortura, ya no digamos para la supermamá que acaba hecha polvo, dolorida, con resaca y cavilando qué habrá hecho mal para que la segunda hija siga recriminándole –en silencio o con desprecios– no sé qué oscura historia.
Como ya tengo una edad me suelen llamar algunas mamás. En realidad a mí me gustaría que también me llamaran sus hijas, pero para ellas ya soy transparente. Pasas a su lado por la calle y ni te ven. Al menos cuando fumaba caliqueños de cinco euros el puro les echaba unas caladas de humos canarios, como sin querer, y las jovencitas me maldecían entre dientes con una ternura reconfortante. Ahora ya ni fumo. Bueno, no estoy seguro.
Me llaman desesperadas las mamás, como si hubieran olvidado el manual de instrucciones con sus hijas, con alguna de las cuales mantienen una sorda guerra de nervios. ¿Qué debo hacer, si estoy siempre irritada con ella, pero me duele que me ignore? Yo me sé esta asignatura en teoría, porque veo mucho los somníferos documentales de La 2 después de comer: «que yo haría como la leona», les digo.
–¿Comérmelas?
Bueno, no. Cuando un felino o una perra tiene muchos cachorros se tiende y deja que vayan encontrando el pezón y que compitan entre ellos. Quiero decir que no la persigas, ni le hagas demasiado caso. Cuando se aproxime (que lo hará seguro) no le hagas preguntas ni reproches. Todo el resto ya obedece a un orden cósmico entre mujeres. Misterio.
Los romanos eran más listos, pero tampoco supieron superar estos mantecosos días de invierno sin pagar tributo al pedorreo y a la comilona. Del 19 al 25 de diciembre celebraban las Saturnales y se hinchaban de comer, porque eran las fiestas de los esclavos que habían trabajado –como nosotros, que somos esclavos del consumo sin saberlo– todo el año como bestias.
Siempre que me dejen en paz, no me molestan estas fechas. Sólo que no me gustan. Me gustarán más cuando quiten anuncios y campanillas bobas en la televisión, aunque la veo poco. Tampoco me gustaría que quitaran la Navidad. Ya llevan un tiempo sugiriéndolo nuestros progre-socialistas gobernantes (una peste).
Que dejan a la gente en paz, aunque seamos españoles.

sábado, diciembre 26, 2009

La crisis está empezando

A finales del 2008 en esta columna ya dijimos que la crisis comenzaba en serio en 2010, mientras el extremeño-catalán Corbacho decía que «la crisis durará dos meses». Como hace ahora la Salgado. O como hace ZP, que cada trimestre va diciendo que lo peor ya ha pasado. Dijimos –en plural- porque no soy yo quien hace los estudios prospectivos y son varios los que van adelantando sus análisis para quien los quiera ver.
En Ibiza ya los creen. Buena prueba de ello es que los políticos ibicencos que van a las ferias turísticas ya no vuelven deshaciéndose en loas y cánticos triunfalistas sobre los niveles de ocupación de la próxima temporada. Hacen lo mismo que el director del Museo Arqueológico de Ibiza (¡15 años cerrado!) que más o menos cada seis meses salía en la prensa anunciando que el MA se abriría la semana, el mes o el año que viene. Como en 15 años no acertó ni una, si ahora le preguntáis  cuándo abrirá el museo, en un alarde de diplomacia y finura contesta: «No tengo ni la menor idea». Y levanta la cabeza oteando el horizonte y recogiendo las sanas hechuras de la brisa.
¿Le habéis preguntado por la temporada a algunos de los desplazados a las ferias? Os dirán lo mismo: «Ni la menor idea». Y tal y tal y tal...
Ya no vale la pena ni siquiera intentar mentir. El paro pesa como una losa. Ya nadie cree absolutamente ni una palabra de los políticos, que en vez de emplear sus energías en trabajar organizadamente en favor de las Baleares se dedican a reuniones de carácter privado, viajecitos, enterrar alijos de descafeinados, pelearse o procurarse los contactos para su propio medre.
El sistema ha fallado por todas partes, y el sistema del Estado de las Autonomías ha fallado mucho más. El Ayuntamiento de Jerez (Pacheco, aquel de «la justicia es un cachondeo» ¿recuerdan?) ya ha quebrado, y otros muchos le seguirán, sin dinero para hacer frente a nada, sólo a sus orgías de funcionariados estériles. También quebrará alguna autonomía. Los precios comenzarán una nueva escalada, aunque los bancos no mueven un euro en préstamos.
Y como Ibiza sufre una crisis estructural subyacente a la crisis nacional e internacional, las malas noticias se acumularán. Por ejemplo, el sistema sanitario de Baleares es muy deficitario, el tercero peor financiado de toda España. Otra: El señor ZP con sus socios catalanes (que se están forrando a costa de todos los españoles) han aprobado la Ley de Financiación Autonómica. Madrid, País Vasco, Navarra, Barcelona salen muy beneficiados. Los que peor parados salen, o sea los paganos de siempre son las comunidades de Valencia y de Baleares.
Nos han pasado el estado de bienestar por delante de las narices, pero no lo hemos afianzado. Somos deficitarios en infraestructuras básicas y elementales. Y por encima de esto, la crisis. La crisis de verdad que ya empieza ahora a hacerse notar con toda crudeza. Queda la esperanza del mes de junio, cuando Ibiza quizás despierte del letargo... hasta finales de septiembre. La esperanza ayuda mucho, pero sólo de esperanza no se come.
Diario de Ibiza

miércoles, diciembre 23, 2009

Un sistema sanitario insostenible

Cuando me metí en el tema del turismo sanitario yo no podía saber que este era uno de los problemas menores del asunto. Claro, uno ya sabe que la sanidad siempre necesita más recursos. Pero esto lo dice todo el mundo: los ayuntamientos quieren cobrar más impuestos, los policías necesitan más medios, un equipo de fútbol necesita más dinero, etc.
Pero el caso de la sanidad es demasiado importante para dejarlo en manos de un o de una propagandista de un partido que ha demostrado su insolvencia y su inoperancia.
La sanidad española está en bancarrota. Ha quebrado, y si fuera una empresa privada ya estaría en el concurso de acreedores o suspensión de pagos.
Ahora no puede quebrar si no quiebra el Estado (una posibilidad cada vez más probable según los últimos vaticinios) pero es una auténtica ruina. Ya son varias las comunidades que no pueden hacer frente al pago farmacéutico. En Baleares se lleva más de un año de retraso en el pago del medicamento. A nadie extraña que se haya reducido un 30 por ciento el gasto sanitario en nuestra Comunidad.
El sistema sanitario español es cada vez menos eficaz y más voraz. No lo dirá la ministra socialista, pero lo saben muy bien los propios sindicatos médicos y las asociaciones profesionales. También lo sabe Ana Pastor, que lleva años reclamando la atención y exige cambios estructurales en el funcionamiento.
¿Quién no se acuerda del co-pago? Está al caer, como creo ya se hace en la Justicia, donde hay que depositar entre 20 y 50 euros para poder recurrir una sentencia. Se tendrá que habilitar una batería de medidas para que la gestión sea más eficaz: una de cada tres visitas a urgencias no es tal; una de cada tres visitas a la atención primaria es por cuestiones de papeleo, etc.
Y menos gravosa económicamente. El español acude un 40% más al médico que el promedio de la Unión Europea. El usuario en España gasta un 20% más en medicación.
Son datos muy serios, preocupantes y reveladores de la Fundación de Estudios de la Economía Aplicada, Fedea.
En diez años faltarán entre 15.000 y 20.000 médicos. El gasto sanitario tiende duplicarse.
La implantación del co-pago está al caer, con un tíquet moderador y una tasa por visita. (En Alemania y en Francia han reducido un 15% la demanda con este sistema).
Actualmente, la tarjeta electrónica no es suficiente y también se tendrán que estudiar sistemas para reducir drásticamente el gasto farmacéutico que parece un pozo sin fondo.
Ana Pastor insiste también en fortalecer la cohesión en la sanidad en las distintas comunidades autónomas hoy muy dañada.
Otra desventaja de las autonomías, que han ido diseñando una España desigual, injusta e insostenible.

sábado, diciembre 19, 2009

La fenicia que dio nombre a Europa


La historia de Europa, la doncella fenicia de orígenes aristocráticos, se cuenta de varias maneras, pero en lo básico, Zeus convertido en un toro manso, de color blanco, la seduce y ella sube a grupas, el toro se adentra en el mar y llega hasta Creta.
Allí le hace el amor bajo unos plátanos. A partir de entonces estos árboles son de hoja perenne y quizás por el origen fenicio estos árboles bordean todas nuestras carreteras ebusitanas.
De esta Europa se deriva el nombre de nuestro continente que tanto debe a la cultura clásica grecorromana, que sería mucho más pobre sin las aportaciones básicas de la cultura fenicia y de la cultura que sin ser propiamente de origen fenicio, fue propagada por ellos.
El toro como animal sagrado, de culto ritual, animal totémico que generó el Minotauro, está presente en todo el Mediterráneo.
Recuerdo en Menorca con placer las explicaciones de Guillermo Florit-Piedrabuena que interpretaba las taules menorquinas como una representación totémica de las astas de un toro. Estilizadas, esquematizadas, naturalmente.
En cualquier sitio del Levante español se encuentran cuevas y material arqueológico en museos confirmando esta magia siempre presente en la Hispania ancestral, como lo está hoy en la actual.
Esto y mucho más es lo que nos hemos perdido en Ibiza al derribar la plaza de toros. Aparte de constituir una fenomenal oferta turística, ahora Ibiza es mucho menos diversa y bastante más aburrida, aunque cueste creerlo.
Ya lo dije, plaza derribada en Baleares, no puede volver a levantarse, por un estúpida ley del PP balear que hay que cambiar cuanto antes. Pero yo recuerdo tres cosos en Ibiza: el de las Salinas, otro en San José y la plaza de toros de Ibiza, que estaba a rebosar con las corridas, pero también con otros espectáculos.
En 1979-80 yo estaba redactando mi ´Diccionario de Secretos´ y puse esto:
«Nuestra pasión por los caballos y los mulos es genética. Pero la afición taurina es injertada y reciente (...)». Me equivoqué. Yo no sabía entonces que en Ibiza se habían celebrado festejos en plazas de toros desmontables muchos años antes. Ya se trataría de investigar los archivos, pero intuyo que aparte de lo que ya sabemos, nos llevaríamos algunas sorpresas.
La plaza de toros se inauguró en 1961. Duró casi 20 años exactos y me acuerdo de ello porque, aparte de varias actuaciones de músicos, yo asistí a la única corrida de toros que recuerdo en Ibiza: la de El Cordobés.
Yo estaba organizando la edición de Ultima Hora en Ibiza. Pedro Serra me había llamado, sin saber que había integrado a un topo de Matutes en la redacción. Cuando hube comprobado el boicot con divertida facilidad, dejé de hacer el tonto y me fui a recorrer el Mediterráneo y, recibido el consejo de Tanit (faz de Baal), cuando regresé a Ibiza inicié la edición del Anuario. Esto nos da la fecha de la muerte de la plaza: tuvo que ser entre 1982 y 1983.
Por cierto el influjo de Tanit es secreto, no se puede revelar pero fue el más fructífero de mi vida. Somos fenicios.

Diario de Ibiza

miércoles, diciembre 16, 2009

Marcharse

Las personas que lean el Diario no podrán quejarse de desinformación sobre nuestra sanidad, porque casi salimos a página diaria. Pero como me decía un banquero de los de antes «para un banco es malo ser noticia en la prensa».
Parece como si en Ibiza saliéramos de un escollo para poder sortear el siguiente con más brío, aunque a decir verdad, los problemas que siempre se repiten suelen ser los mismos: la contratación de especialistas.
La nueva dirección explicaba ayer la posibilidad de quedar sin oncólogos. O de quedar sólo con uno de los tres contratables.
Las causas explicadas con un lenguaje políticamente muy correcto ya son conocidas y no difieren mucho de las que puedan afectar a los trabajadores del sector judicial, policial o funcionarial en amplios términos.
Ibiza ha dejado de ser una pera en dulce y ha perdido la aureola (mi querido elefante Walter Benjamin emplearía la palabra «aura») que tenía en los años 70, cuando todo estaba por hacer y realmente se hicieron cosas en gran parte porque vinieron especialistas desde todas partes de España y algunos hasta de Europa o desde otros trabajos en Estados Unidos.
Ibiza atraía mucho, trabajar en la isla era un plus añadido de prestigio, era un destino envidiado no por las posibilidades de estudios ni por un contexto universitario.
¿Entonces? Yo creo que era por la calidad de Ibiza. En los años 70 había otra vibración y otro ritmo vital, con la naturaleza al alcance, con hermosas playas y calas vacías, con un mar accesible y bondadoso (¡salvo en otoño!).
Todo era más rústico, más táctil y al mismo tiempo aquellos profesionales estaban a una hora de avión de cualquier ciudad española y a tres o cuatro de las ciudades europeas más excitantes.
Eso quizás fuera lo de menos, pero el mundo exterior estaba cerca, aunque vivir en éste diera la sensación de una Arcadia relativamente feliz. Y encima con un sueldo superior en una isla donde los precios eran bajos.
Y además, donde se aprendía inglés, francés o alemán desde el primer día. Cuando Manolo Vázquez Montalbán expresó la ecuación secreta del universo progresista («Contra Franco vivíamos mejor») en realidad estaba definiendo la fibra sensible de todo un paisanaje, de una manera de ser y de vivir.
En los años 70 eran impensables estas inmersiones y persecuciones lingüísticas importadas de la Cataluña más vulgar y atroz. Y a pesar de todo, o quizás por ello, el conocimiento del catalán crecía sin aspavientos ni imposiciones, por propia simpatía y por interés.
Todo esto ahora ha cambiado mucho.
La carestía, la cesta de la compra y la calidad de vida han hecho mella en todos nosotros. En los años 70 estaba todo por hacer y había un difuso sentimiento de optimismo y de ilusión que lo impregnaba todo, desde el horario de un cirujano a la sesión de un pintor o el trabajo de un camarero.
Ahora veo poco o nada de esto. A lo máximo que se aspira es a sacar una subvención, acabar el turno y esconderse en casa, quien pueda pagar la hipoteca (inalcanzable) o el alquiler (por las nubes).

Diario de Ibiza

sábado, diciembre 12, 2009

La salud de nuestra sanidad



Me quedó pendiente un tema que afecta mucho a Baleares: el turismo médico, de bisturí o sanitario. Mientras procuro hacerme con algunos datos –siempre esquivos—constato que el estado de nuestra sanidad no es especialmente envidiable.
La única faceta que veo con inmejorable optimismo es la proliferación de sindicatos. Si no lo he soñado, leo el pie de foto publicada en el Diario donde se nos informa que hay representantes de ¡seis sindicatos! Hombre, eso sí que es variedad y alegría.
Por lo demás ya ha ocurrido lo que tanto temíamos por estos pagos: nos ha pasado la década de la locura millonaria y una vez más Ibiza y Formentera han perdido el tren. Quiero decir que seguimos sin las estaciones, sin los puertos y sin los hospitales que tanto necesitamos. Y ya se acabaron los contingentes europeos de dinero o del gobierno central. Aquí no veremos ya un euro nunca más por este concepto. Ibiza ha perdido el tiempo y el tiempo es oro.
Ahora vienen los consejeros del Govern desde Palma explicando la imposibilidad de un presupuesto suficiente y piden comprensión por los tiempos críticos que vivimos. Comprendemos. Entonces ¿por qué no solucionaron las cosas cuando los dineros boyantes y florecientes crecían hasta bajo la sombra de las coles en las cajas de chocolate?
Ahora, buenas palabras y voluntarismo, pero mucho menos dinero: se nos recorta más de un 30% el presupuesto para sanidad. Si antes sufría gravísimas carencias y disfuncionalidades, imaginen ahora. No es raro que entre tanto sindicato, tanto recorte y tanta carencia ni siquiera se haya comenzado el nuevo hospital. (Por cierto, me apunto todavía al cambio de ubicación). Ni que el personal sanitario anduviera alborotado, hasta el punto de que han dimi-cesado al director Cárceles. Pero si los problemas son tan graves como intuyo, la dimisión de un director no solucionará los problemas de nuestra mala salud, porque ya llueve sobre mojado, como en el caso de la contratación de especialistas.
El Ib-Salut ha efectuado 20.574 traslados sanitarios en un año, al tiempo que más de 3.500 pitiusos están en una lista de espera (a veces de muchos meses) para consultar con el especialista o para pasar por el quirófano. Algunos tendrán difícil ser atendidos si antes no se contrata al personal cualificado en Urgencias, Cardiología, Oncología y otros de la Unidad de Hospitalización a Domicilio y en los centros de salud (leo el Diario del día 4 de noviembre, ojalá ya se haya incorporado alguien desde entonces).
Nuestra sanidad es demasiado importante para venir ahora recortando un tercio el presupuesto. Hay que abastecer y animar al personal. Todo tiene solución, aunque para ello tengamos que llegar al inusitado extremo de ponernos de acuerdo entre varios grupos políticos o incluso, y por mucho que nos duela, prescindir de algún sindicato.
En este contexto, que tengamos que atender a unos miles de extranjeros o residentes europeos, es un problema añadido, pero no era lo más urgente. Otro día lo hablaremos.

miércoles, diciembre 09, 2009

Turismo sanitario

Descubrí esta expresión a principios de esta década en la prensa de Valencia, que ya entonces mostraba su alarma por el creciente aumento de extranjeros que se colaban en Urgencias para conseguir una operación quirúrgica de envergadura.
No hace mucho, el ex-presidente de Extremadura Rodríguez Ibarra se quejaba de los mismos abusos, viniendo a decir que cosa muy distinta es atender a los enfermos sin recursos y otra tener que cubrir los fuertes gastos de muchos aprovechados con medios que consiguen su cambio de cadera, un marcapasos y otras cosas por el estilo en la sanidad española.
Un doctor extremeño le contesta que no es tan fácil ser atendido para una operación si no es cuestión de supervivencia. Pues sí, estos enfermos ingleses, franceses o alemanes vienen con la lección bien aprendida.
Hace unos días la ministra española logró bloquear la nueva Directiva europea, que hubiera empeorado nuestra situación porque hubiera supuesto unos 2.000 millones de gasto añadido. La ha bloqueado, y eso es bueno, pero el tema no queda resuelto.
Me extrañaría mucho que los negociadores socialistas (que por cierto presidirán la Unión Europea durante los próximos seis meses) tengan la habilidad necesaria para salir bien del envite. Desde luego sería la primera vez, y si no que se lo pregunten a los agricultores españoles, abocados a la ruina por unas nefastas negociaciones.
Se le llama turismo sanitario, médico, de bisturí o de salud. En casi todos los países del mundo intentan atraer clientes que aprovechen los quince días de vacaciones para hacerse una operación quirúrgica de envergadura o unas mejores de cirugía plástica y estética.
Siempre fue así. ¿Quién no recuerda al habilísimo Pitanguy en Brasil, de quien se dice que reinventó los mejores senos del Hollywood de los años 60 y 70? Otros cirujanos se han hecho famosos en algunas ciudades de Marruecos por operaciones de cambio de sexo y otras menudencias. Casi tanto como los cirujanos de Tailandia, que son reconocidos por sus excelentes trabajos en transexualidad.
Más tétricas pero no menos importantes han sido las peregrinaciones a París o Londres para abortar. En Valencia hicieron fiestas y grandes celebraciones para recibir un barco-quirófano holandés que practicaba abortos en aguas internacionales. Por qué estaban tan contentas y tan festivas las feministas de la huerta es un motivo que ignoro, pero la prensa y la televisión les hizo la publicidad gratis. No es necesario recordar que ciudades como Madrid o Barcelona a su vez acogen a muchas embarazadas europeas que aprovechan la laxa situación española para abortar o lo hacían hasta que hubo algunas investigaciones que detuvieron el escándalo.

sábado, diciembre 05, 2009

El toro, símbolo del dios Baal

La importancia del toro era primordial en el universo fenicio y cartaginés, donde incluso el tofet o altar tenía forma de piel de toro. En Hispania se han encontrado piezas y joyas con la misma forma.

A menudo he bromeado con eso de que el animal nacional de Ibiza es el erizo, y la lagartija lo es de Formentera. Como ven, los pitiusos vamos con pocas pretensiones.
¿Cuál es el animal emblemático de Ibiza, aquel que llevamos más o menos impreso en nuestro subconsciente colectivo y que llena de admiración a los ibicencos? No puede ser otro que el toro. El toro y el caballo.
En realidad la cultura derivada de los toros está muy extendida. La mitología mediterránea sería incomprensible si no existiera un animal emblemático como el toro.
Pero es que les ocurre lo mismo a nuestros primos los catalanes.
Cuando se piensa en la relación del toro con Cataluña uno enseguida cae en los griegos de Ampurias, más adelante romanizados y amalgamados con los íberos. Pero eso no es exacto, pues en toda Iberia se conocen representaciones muy anteriores del toro como animal totémico, animal sagrado. Las leyendas en relación con los toros y con la tauromaquia nos retrotraen a tiempos de Tartessos y si le echamos un poco de imaginación retrocederíamos miles de años, a la mismísima Atlántida.
Más reales son las representaciones de los toros y otros bóvidos en Altamira y otras decenas de grutas que conservan estos tesoros muy anteriores al Neolítico.
Mi amigo Fernando Sánchez Dragó ha explicado hasta la saciedad la cultura del toro en Iberia y en todo el Mediterráneo y no sólo en sus dos tomos de la ´Historia mágica de España´ (fue uno de los primeros en usar este adjetivo en un título, antes que yo y el catalán Carlos Garrido).
La importancia del toro y su culto es innegable, es una evidencia. ¿Por qué lo rechazan los catalanistas? Porque usan los toros para enfrentarse al núcleo de poder centralista. Así, en Cataluña están en contra para fastidiar a Madrid, pero en el sur de Francia (lo que ellos llaman pomposamente la Cataluña francesa o Cataluña Norte) están a favor de los toros porque en París los tienen prohibidos. Es lo que se dice dar una patada en el culo del torero cuando se la quieren dar al poder central.
Zeus raptó a la hermosa fenicia Europa en aguas de Tiro (Fenicia), que es nuestra ciudad primigenia. Los ibicencos provenimos de los cartagineses, que no eran sino tirios que salieron por piernas y fundaron Cartago.
Aquel toro blanco zalamero acarició a la doncella, que muy confiadamente lo montó en el lomo, ocasión que aprovecho aquel animal para correr mar adentro hasta llegar a Creta. La doncella quedaría muy impresionada por aquel David Meca manso pero bravo, albino pero con cuatro patas y un hermoso rabo.
¿Y qué dirían que pasó? Pues... lo que tenía que pasar. Aquel toro no era otro que el jefazo de todos los dioses, o sea Baal o Zeus si adaptamos el mito al panteón griego.
No es casualidad que el toro bravo sea el símbolo de nuestro dios, el terrible Baal, que era un dios básico en Ibiza, aunque siempre hablamos de Tanit.

Diario de Ibiza

miércoles, diciembre 02, 2009

Ahora toca reventar el turismo rural


Con la excusa de una crisis existente y muy dura, un Gobierno que se las da de progresista ya ha pegado dos puñaladas más regresivas que progresivas a la hostelería balear, que afectarán mucho a Ibiza.
En esta nebulosa el Govern de Antich ya facilitó a los hoteles un incremento del volumen de edificación, o sea más plazas disponibles. Introducir más plazas en Ibiza ya es un auténtico suicidio. Si se hacen será por el negocio directo que supone apilar ladrillos, pero el turismo balear está pasando por un higiénico proceso de renovación, y quien no lo vea así es posible que se encuentre en un mundo incomprensible y con un agravante: si se devalúa el turismo, también se devalúa el valor de los inmuebles.
La segunda puñalada la acaba de hincar ahora mismo el Govern balear progresista con el nefasto Decreto Ley 60/2009, mediante el cual «se establecen la unificación de los procedimientos y la simplificación de los trámites en materia turística y también la declaración responsable de inicio de actividades turísticas». (Consultar en www.derecho.com).
El decreto ha enervado al GOB que interpreta este decreto como una forma definitiva de reventar el agrotusimo y el turismo rural. Y ello sabiendo que ahora están de moda los pequeños establecimientos rurales, pero la crisis ha afectado a todos de forma casi idéntica según los datos del Instituto Nacional de Estadística: «Las pernoctaciones realizadas en alojamientos turísticos extrahoteleros (apartamentos, campings y alojamientos de turismo rural) superan los 5,9 millones en octubre, un 8,6% menos que en el mismo mes del año anterior». Sólo es un ejemplo.
Siempre ha ocurrido lo mismo en Ibiza, o sea, cuando un negocio ha demostrado su solvencia y su éxito, de una temporada para otra le han copiado un centenar de vecinos, con lo cual se consigue que no funcione el primero ni los últimos. Pero esto es una servidumbre al libre mercado y a las leyes de la competencia.
El agroturismo permitía 25 plazas hasta este momento, y el hotel rural 50, junto con otras limitaciones. En suma, estas instalaciones turísticas han de estar sujetas a la actividad rural agraria. Esto ya se ha terminado. De hecho en el mismo Diario de Ibiza hemos visto disparatados proyectos de reforma que camuflaban habitáculos turísticos.
Toda Ibiza se llenará de grupúsculos, de grupos y de casitas-hotel. Se abandonará todavía más la actividad agrícola y los caminos estrechos y hermosos de la isla se convertirán en un trasiego agobiante.
Hemos conseguido lo que tanto temíamos, que no es otra cosa que romper otro equilibrio que hasta ahora conservábamos a pesar de todo. Y para más recochineo, con el beneplácito de un gobierno que se les da de progresista y de ecologista. Ya. Puja aquí i veuràs Porto Pi!

Diario de Ibiza