domingo, febrero 17, 2008

Un poco decepcionado


Hay varias noticias que me han dejado un poco deshinchado. ¿Decepcionado yo? Es una forma de decir en quien de la política espera todos los frutos en consecuencia (nada) y sus frutos subsiguientes (ninguno).
Pero de alguna manera tengo que decir que me parece desesperante que se pierda tanto tiempo en nimiedades y aventuras estrambóticas. No sé mis compañeros de página lo que pensarán, pero llevar tantos años hablando de la carencia de taxis en una isla atiborrada de coches, y el haberse pasado todo el invierno discutiendo de las licencias, me parece un síntoma de la bobalicona realidad de las Pitiusas.
Cuando deduje que el gobierno del Consell Insular había pasado los primeros cien días cosiendo los flecos de Eivissa-Centre no me sorprendí.
Pero señores, cuántas decepciones una tras otra, año tras año.
Al menos el ayuntamiento de Vila tendrá por fin la pista libre para emprender las obras para quitar las barreras arquitectónicas que tienen encorsetada la ciudad.
Pues no, era la intención de… ¡pedir un informe! De todas las ciudades Patrimonio de la Humanidad. Ya sabemos todos porque piden tantos informes, pero al menos, que alguien los lea. A lo mejor nos llevamos la sorpresa de encontrarnos con uno de utilidad que se pueda aplicar en el funcionamiento de nuestra ciudad o de nuestra isla.
Tarrés inaugura el informe de los informes, porque no le basta con ganar las elecciones para gobernar, necesita nombrar cargos no electos. Pero entre todos, pobre gente, que pena me dan, no saben qué hacer para gobernar. Coño, si es muy fácil: pedir un informe con un Plan de Gobierno.
Y eso es lo que han hecho.
Informes. Podríamos aplicar esta técnica a la hora de pagar impuestos. Cuando nos llegue la fecha, ir a la oficina de arbitrios, sellar un papel no negándose a pagar –te pueden empapelar con tantos informes acumulados- sino pidiendo una moratoria mientras nuestro asesor fiscal nos hace un informe sobre los usos que se darán a estos impuestos.
Sinceramente, gastáis más energía para esquivar el trabajo que haciéndolo.


Regreso a Mariano Digital