miércoles, diciembre 29, 2010

El resplandor púnico



Ya en pleno mes de diciembre disfruto de una noticia que ya no me extraña. En realidad son varias, el hallazgo de un necrópolis y la intención de trasladarla: «Las obras de construcción del nuevo hospital Can Misses han puesto al descubierto una necrópolis rural de época romana de alto valor que afecta a la construcción del ala de psiquiatría. Ante la imposibilidad de mover el edificio previsto, el Consell ha optado por trasladar las piezas desmontables (las tumbas de piedra) y reproducir los hipogeos (cavidades sobre la roca) del yacimiento en un nuevo emplazamiento a 20 metros del actual. El hallazgo ocupa una superficie de 140 metros cuadrados. El Consell asegura que esta decisión no se puede comparar con el criticado traslado del acueducto romano de Can Misses de la pasada legislatura.»

No son las cuatro tumbas que suelen aparecer cerca de casi todas las casas payesas antiguas (no en las recién construidas). Según el informe del arqueólogo estamos ante un ajuar funerario calificado como el más completo, el mejor conocido y el más amplio ahora mismo de Ibiza.

No es moco de pavo. Después de la destrucción sistemática de focos arqueológicos que salieron al paso de las obras de la autovía no podemos seguir borrando del mapa nuestro material arqueológico, de un valor incalculable.

Un día es un complejo sistema de zanjas y nichos para cultivar, otro día es una necrópolis rural o un acueducto de la época romana. No podemos seguir desechando nuestro patrimonio. Ya hemos arrasado una gran parte del patrimonio natural. Todo lo que sea traslado equivale a destrucción. 

En realidad ¿para qué quieren moverlas de sitio? Bastaría sacar fotos, vídeos y después destruirlas.

Me recuerda el gran descubrimiento de los restos púnicos bajo los cimientos del Museo de Arte Contemporáneo. Yo las dejaría a la vista escrupulosamente museizadas.

Lo mismo haría con la Necrópolis. Un buen trabajo de museización y dejarlas exentas y cubiertas, pero jamás trasladarlas.

Con los materiales transparentes que se pueden usar hoy sería un detalle genial y un rasgo más de nuestro valor fenicio. No hay que temer a la muerte, sólo al caos, a la destrucción y a las retroexcavadoras. Y por lo visto, tanto dañan si las maneja el PP como el PSOE.

Déjenlo a la vista, decórenlo con plantas... hagan algo hermoso a la par que útil. ¿No somos fenicios?