miércoles, abril 06, 2011

Permiso para prohibir


He recordado la fábula de Samaniego donde la zorra intenta alcanzar un hermoso racimo de uvas dorado y a la sazón. Brinca con fuerza pero no logra llegar y tras varios intentos, ya desanimada, exclama aquello de «bah, no las quiero, están verdes».

Lo mismo ha hecho Antich cuando le han preguntado por los peligros ecológicos de los sondeos petrolíferos en nuestras costas: «bah, no suponen ningún escándalo», olvidando que los socialistas baleáricos se han manifestado en contra de estas prospecciones, pero no han conseguido detener el proceso en Madrid.

No habrá escándalo porque el balear lo traga todo. Lo tragamos todo. Pero que nadie descarte daños a medio y a largo plazo de los que, por supuesto, un Antich ya amortizado no responderá ante la opinión pública.

De momento asistimos a una batería de actos a los que llaman inauguraciones, aunque muchos de estos equipamientos no estén terminados. Se trata de puentear la ley electoral y ofrecer resultados palpables ante los ojos de los posibles votantes. Pero los votantes no debiéramos olvidar que esta propaganda no puede ocultar un pacto que jamás debiera de haber existido con UM ni unos años de esterilidad y merma para nuestras islas.

Hay quien dice que hemos perdido una década. No lo sé, pero es cierto que las instalaciones, los hoteles y las personas somos diez años más viejos, tenemos menos ilusión y hemos gastado muchos recursos para ir sobreviviendo, simplemente eso, para sobrevivir, que no es poco, pero tampoco es gran cosa.

Al menos en Mallorca la maquinaria del sistema judicial echa humo. En Ibiza ya es otra cosa, aquí los legajos parecen dormir pacientemente el sueño de los justos. Nos habría gustado saber el resultado de las pesquisas y conocer la sentencia sobre el caso Ibiza Centro antes de votar. Por ello, yo me abstendré de votar a ninguna lista que lleve imputados (caso del PSOE), no vaya a ser que con su peculiar sentido del humor, una vez hayan salido elegidos, nos cuenten que el voto popular ya les ha absuelto de sus imputaciones.

Pero no, los delitos, el código penal, van por un camino aparte. De ahí la importancia de la separación de poderes.

De momento nos espera un verano muy extraño en el que me pregunto cómo se gestionarán las numerosas prohibiciones de un gobierno socialista, aunque a menudo apoyado por los nacionalistas.

El IVA nos lo tragaremos, las congelaciones de salarios o de las pensiones lo mismo, pero ¿esto de no fumar valdrá en todos los bares, restaurantes, comedores, hoteles, salones, discotecas de Ibiza y de Formentera? 
No lo sé pero, si se quejan, explicadles que hemos votado dos veces a ZP y que a cambio nos ha dejado en la ruina y nos ha prohibido la bollería fina, ir a más de 110, los toros en la tele y en Cataluña, el fumar, ojo con el alcohol y cuidadito si eres cristiano y llevas símbolos explícitos.

En conjunto, en Ibiza intuyo que el escándalo va por dentro.


Diario de Ibiza