miércoles, septiembre 07, 2011

Vértigo


Comienza la época del mejor verano, del más sosegado septiembre, que sucede a sesenta días de vértigo. Quienes hayan pasado la prueba, trabajando o veraneando, ya están doctorados ante cualquier desgracia en cualquier parte del mundo.

Benditos aquellos que han podido disfrutar de algún rincón pacífico y refrescante –en Ibiza no abundan, pero haberlos haylos– rodeados de sus libros, su fruta y su vino, y de algunos amigos o familiares. Esta minoría ha conocido la Ibiza arcaica, el silencioso refugio mediterráneo milenario.

El resto, la gran mayoría, sigue buscando animación, quizás sin imaginarse que se le dará con creces y con no pocas tentaciones peligrosas.

Un simple vistazo a la prensa nos evidencia que Ibiza ha recuperado lo peor de sí misma: el caos, la violencia y la droga. Dicen que desde 1998 no se había visto nada parecido, o sea, hemos vuelto a las andadas trece años después. Siempre que la isla funcione con un nivel alto de ocupación, y hogaño ha sido óptima, solemos funcionar mal, a destiempo y a trompicones, dejando no pocas víctimas varadas por el camino.

Golpes de calor, accidentes de moto o vehículos diversos, lanzamientos temerarios desde el balcón, excursionistas inexpertos que se despeñan, ahogados en el mar o accidentados al estrellarse contra las rocas del fondo solo son unas cuantas constantes. Siempre habrá accidentes, pero lo llamativo es que haya tantos, quizás porque coincide una gran densidad de población (el famoso medio millón de habitantes, que tomen nota Palma y Madrid) con un estado físico o mental mermados en algunos aspectos.

Esto no fue todo, folks. El año 2011 necesitaba darnos una lección implacable, durísima que ha dado cuenta de una gran parte de los bosques de es Amunts. Temprano ardió el bosque, lo hizo sin piedad, quizás para dejar claro el mensaje: volverá a ocurrir muy pronto. Descansamos sobre una bomba.

Muchos trabajadores han vivido un verano de vértigo: conductores, taxistas, policías (con el espectacular final con la operación contra la Camorra), personal sanitario.

Sólo faltaba la última locura, la gran estupidez de los ´Oxyshots´ o la salvaje ignorancia de estos chicos del estramonio, en Madrid y Badajoz.

No es extraño que uno de los videos de mayor éxito haya sido la ´Pizza in Ibiza´ , narrando las patéticas aventuras de los clubbers en San Antonio o en la Playa d´en Bossa.

Supongo que en 2012, los países ribereños mediterráneos nos ayudarán a quitar tanta presión y compresión sobre nuestro territorio y recuperarán su cupo de británicos, italianos y otros jóvenes que vienen a quemar llanta a la isla.