sábado, julio 18, 2009

El Santo Grial de Valencia es el auténtico

El Papa ofició la misa con el Santo Grial en su última visita a Valencia


Noticias recientes refuerzan la tesis de que el cáliz guardado en la Catedral de Valencia es el verdadero Santo Grial, o sea la misma copa con que el Nazareno convirtió el vino en sangre en la última cena.
El buscadísimo Santo Grial tiene muchos competidores, desde Gran Bretaña, hasta el sacro catino de Génova o incluso otro que yo también he visto en Pedrafita do Cebreiro (en Lugo), en de Antioquía y si se toma el grial como un tesoro más complejo, se habla de otras reliquias guardadas en Viena y en Roma. Y seguro que en otros sitios.
Aparte del interés por la literatura griálica o su poder mistérico de tintes religiosos, me interesé especialmente por la joya desde que supe que al menos una vez se ha salvado gracias a la intervención de alguien de Ibiza, que lo guardó arriesgando su vida.
«En marzo de 1809, ante el avance de las tropas francesas, y con el fin de salvar la reliquia de la rapiña de Napoleón, el Santo Cáliz fue sacado de Valencia y fue llevado primero a Alicante. De Alicante volvió a Valencia en febrero de 1810, pero en marzo de dicho año hubo de ser trasladado de Valencia a Ibiza, y en febrero de 1812 a Palma de Mallorca. De Palma de Mallorca el Santo Cáliz volvió a la Catedral de Valencia en septiembre de 1813».
Gracias al blog de José Barral, que lo tiene mejor archivado que yo mismo, recuerdo mis tres artículos sobre el tema:
´El Santo Grial de Valencia... en Ibiza´ (Edición digital n. 2809, MIÉRCOLES 23 AGOSTO 2006). Hace más de tres años ya había tratado este asunto en otros dos artículos suyos: ´El Santo Grial estuvo en Ibiza´ (Diario de Ibiza, 1 de febrero del 2003) y ´Cómo llegó el Santo Grial a Ibiza y Valencia´ (Diario de Ibiza, 5 de febrero del 2003).
El hecho es que en todos los encuentros y congresos recientes se da como el único posible e históricamente fiable y coherente al cáliz de Valencia, que llegó a Hispania desde Roma gracias a San Lorenzo. A partir de ahí (y aun antes) se le sigue la pista sin ningún resquicio de duda, como deja certificado un estudio reciente del medievalista italiano Alfredo Barbagallo.
Más completo y desapasionado es el libro de Janice Bennett, norteamericana que va desechando todas las tesis, hasta quedarse con la coherencia histórica, tradicional y mitológica que arropa el Santo Grial de Valencia.
El libro ha sido muy loado, y doy toda la ficha: ´Janice Bennett. San Lorenzo y el Santo Grial. La historia del Santo Cáliz de Valencia. Ciudadela´. Madrid, 2008. 334 pp. 19,50 €.

Diario de Ibiza